martes, 23 de agosto de 2016

MITOLOGIA... En busca de nuestros orígenes

MITOLOGÍA

Ana Luisa Morán
El término griego mythologia está compuesto de dos palabras:
·         Mythos (μῦθος), que en griego clásico significa aproximadamente “el discurso ‘palabras con actos’ (Esquilo: «ἔργῳ κοὐκέτι μύθῳ», ‘de la palabra al acto’) y, por extensión, un ‘acto de habla ritualizado’, como el de un jefe en una asamblea, o el de un poeta o sacerdote  o un relato (Esquilo: «Ἀκούσει μῦθον ἐν βραχεῖ λόγῳ», ‘la historia completa que oirás en un breve lapso de tiempo’).
·         Logos (λόγος), que en griego clásico significa: la expresión (oral o escrita) de los pensamientos y también la habilidad de una persona para expresar sus pensamientos (logos interior).
Eliade, M. (2013) analiza los Mitos o al término más claramente especificado, primero hacia las sociedades en las que el mito tiene o ha tenido hasta estos últimos tiempos “vida”, en el sentido de proporcionar modelos a la conducta humana y atribuir así una misma significación y valor a la existencia.  Estudiar y comprender la estructura y la función de los mitos en las sociedades tradicionales no solo es explicar una etapa en la historia del pensamiento humano, sino también en comprender mejor a nuestros contemporáneos.

Según Mircea,  intentar definir la palabra mito resulta difícil, primero habría de ser aceptada por los eruditos  y por el otro que sea accesible a los no especialistas, ¿acaso es posible encontrar una definición única capaz de abarcar todos los tipos y funciones de los mitos en todas las sociedades, arcaicas y tradicionales? El mito es una realidad cultural extremadamente compleja, que puede abordarse e interpretarse en perspectivas múltiples y complementarias. Pero, al decir de Mircea Eliade la definición que le parece menos imperfecta, es la siguiente: el mito cuenta una historia sagrada; relata un acontecimiento que ha tenido lugar en el tiempo primordial, el tiempo fabuloso de los (comienzos).

 Dicho de otro modo: para Mircea el mito cuenta cómo, gracias a las hazañas de los seres sobrenaturales, una realidad ha venido a la existencia, sea ésta la realidad total, el Cosmos, o solamente un fragmento: una isla, una especie vegetal, un comportamiento humano, una institución. Es, pues, siempre el relato de una (creación): se narra cómo algo que ha sido producido, comenzar a ser. El mito no habla de lo que ha sucedido realmente, de lo que se ha manifestado plenamente. Los personajes de los mitos son seres sobrenaturales. Se les conoce sobre todo por lo que han hecho en el tiempo prestigioso de los «comienzos». Los mitos revelan, pues, la actividad creadora y desvelan la sacralidad (o simplemente la «sobre-naturalidad») de sus obras. En suma, los mitos describen las diversas, y a veces dramáticas, irrupciones de lo sagrado (o de lo «sobrenatural») en el Mundo. Es esta irrupción de lo sagrado la que fundamenta realmente el Mundo y la que le hace tal como es hoy día.

El autor aborda una perspectiva muy diferente sobre el estudio del Mito, no relacionándolo con lo falso, sino que a medida de la historia el mito tiene mucha importancia en la cultura de los pueblo para explicar los hechos, acontecimientos de lo que rodeaba al hombre a inicios de nuestros tiempos, ya que la ciencia y el conocimiento no estaba tan evolucionado como en la actualidad. En efecto, los mitos relatan no sólo el origen del Mundo, de los animales, de las plantas y del hombre, sino también todos los acontecimientos primordiales a consecuencia de los cuales el hombre ha llegado a ser lo que es hoy, es decir, un ser mortal, sexuado, organizado en sociedad, obligado a trabajar para vivir, y que trabaja según ciertas reglas.
Si el Mundo existe, si el hombre existe, es porque los Seres Sobrenaturales han desplegado una actividad creadora en los «comienzos». Pero otros acontecimientos han tenido lugar después de la cosmogonía y la antropogonía, y el hombre, tal como es hoy, es el resultado directo de estos acontecimientos míticos, está constituido por estos acontecimientos. Es mortal, porque algo ha pasado in illo tempore. Si eso no hubiera sucedido, el hombre no sería mortal: habría podido existir indefinidamente como las piedras, o habría podido cambiar periódicamente de piel como las serpientes y, por ende, hubiera sido capaz de renovar su vida, es decir, de recomenzarla indefinidamente. Pero el mito del origen de la muerte cuenta lo que sucedió in illo tempore, y al relatar este incidente explica por qué el hombre es mortal.
El Mito a lo largo de la historia del ser humano acompaña en su cultura a las sociedades, para trasladar sus conocimientos o para contar los acontecimientos pasados y dignos de memoria, para que en el transcurso se hagan públicos.

Bibliografía:
Mircea Eliade. (2013)   Mito y Realidad. España: Editorial Kairos



1 comentario:

  1. El mito es la explicacion no cientifica del porque de la vida y el quehacer de los humanos.
    Que grato leerte.

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